D-. Manuel Araullo y González, nació en Balayan, Batangas el uno de enero de 1.853 y falleció en Manila el veintiséis de julio de 1.924.
En 1.913 fue nombrado juez de la Corte Suprema y el uno de noviembre de 1.921, sucedió a D., Victorino Mapa como presidente del Tribunal Supremo de Filipinas.


El mismo día del fallecimiento de D., Manuel Araullo y González, aparecía el artículo escrito por D., Filemón Sotto titulado "THEMIS ESTÁ DE LUTO", en el periódico La Revolución, que dice así:
<La muerte del Presidente Araullo, aunque se la veía venir desde hace días, no por eso ha de ser menos dolorosa y lamentada por todos. Hombre bien equilibrado, con inmaculadas bases morales y dotado de excepcional dominio de las ciencias jurídicos, con propiedad puede decirse de él que fué recto y justiciero. En sus venerables manos, la vara de Themis no podía correr riesgo alguno de ser doblegada; ni la amenaza del fuerte, ni los ruegos del débil podía torcer su claro y bien fundado criterio; la balanza de la Justicia permanecía constantemente en su fiel.En más de una ocasión, siendo todavía Juez de Primera Instancia, y en épocas en que la inamovilidad judicial no estaba de ningún modo garantida, intereses superiores, pero bastardos, requirieron veladamente un fallo condenatorio para cierto popular é inolvidable periódico: "El Renacimiento". Pero Araullo, encastillado en los cánones de la Justicia y aplicando la ley con rectitud y decisión, prescindió de toda otra cualquiera consideración extraña y falló aquel resonante pleito, según le dictaba la razón y su conciencia: Absolviendo al acusado. Verdad es que con aquella sentencia atrajo para sí los odios del poderoso, pero en cambio se ganó la admiración de todas las conciencias justas y honradas.
Sobre la tumba del malogrado Magistrado sobrarán todos los epitafios que el cariño y la elocuencia pudieran trazar. Para hallarla y reconocerla, bastarán estas palabras: ARAULLO, EL JUSTICIERO.
Comentarios
Publicar un comentario